Datos personales

Mi foto
Aunque vayan sin cresta, son mucho más combativos contra el sistema los que estudian y se preparan para transformar la realidad.

lunes, 17 de octubre de 2011

¿Sabes que es lo que más me gusta de cuando conoces a alguien? Que nunca sabes lo importante que puede llegar a ser para ti. Aveces no se trata  de quien sea o como sea, sino del mero echo de que cuando no esta a tu lado te vuelves sensible y desprotegido, echas de menos su olor, su pelo, incluso sus gestos raros. Tal vez yo sea estúpida y lo admito, y me gusta ser así, y confiar en las personas ciegamente, y que me fallen porque quien no me quiera a su lado, que le follen. Y la cosa de todo es que no sabemos lo que sentimos por el mundo que nos rodea, no nos planteamos esa misera pregunta de ¿Quien estará pensando en mi, en este mismo instante? Somos egoístas. Pero cuando conoces  a alguien, cuando ese alguien forma parte aunque tan solo sea de una milésima parte de tu vida, entonces, nada sigue el curso de las cosas, y si ese alguien de verdad es importante, te arrastrará a ti y a tus no puedo, a un nosotros juntos podemos. 
Ni flores, ni velas, ni luz de luna. Ése es el verdadero romanticismo: alguien que llegue, te empuje a hacer cosas de las que jamás te creíste capaz y que arrase de un plumazo con tus principios, tus valores, tus yo nunca, tus yo qué va.

No hay comentarios:

Publicar un comentario