-¿Puedo pedirte algo? Pasa a por mi cuando quieras estoy preparada para ti, cuando este a punto de bajar el último escalón abrázame muy fuerte, evita que tropiece y vuelva a caer. Cuando paseemos por la calle dame la mano y guíame, llévame a ese lugar secreto que vas cuando necesitas estar solo, y cuando lleguemos susurrame al oído lo que sientes por mi. Yo solo te digo que me muero por tener algo contigo.

Los problemas no se deben olvidar, se deben afrontar. Hoy puedo fingir estar bien y olvidarme de todo por un momento pero mañana estaré peor de lo que jamás he estado porque aquelló que ayer olvide, hoy sigue conmigo. Y estoy hasta los mismísimos , así de claro, la vida no va a sonreírme lo se, pero yo a ella sí, joder, yo le voy a sonreir, le voy a llorar, y me voy a burlar de ella, porque nadie me va a decir que debo hacer, nadie se va a meter en mi vida, nadie va a subestimar-me, soy demasiado débil  soy persona, pero puedo afrontarlo , claro que puedo, pero, tengo miedo, siempre he tenido miedo a enamorarme y ahora, joder ahora lo estoy, y me doy cuenta de lo que es depender de otra persona y que el intenta ayudarte pero es un circulo vicioso porque a veces el mismo es el que te hace llorar, y no quiero que mi felicidad dependa de otra persona, quiero que mi felicidad dependa de el, y que si el tiene un problema lo tenemos los dos, y lo afrontamos y lo cogemos por los cuernos porque si no nos puede, y no somos, dos, somos solo uno, y he aprendido algo, jamás, nada, ni nadie va a derribarme porque estoy harta de llorar, de mentirme a mi misma joder, soy fuerte, y mi vida, vale la pena.

Déjame que te cuente...

Hoy es 11 de Septiembre de 2001, se respira la tranquilidad en Nueva York. En este instante, alguien despierta, y alguien llega a casa después de un día de fiesta, alguien coge un vuelo, y alguien lo pierde, seguramente ahora mismo, alguien esta besando a otra persona, alguien corre por miedo, y una pareja folla apasionadamente, alguien lucha por lo que quiere, y otro rompe con sus ideales, a alguien le están rompiendo el corazón, alguien llora desconsoladamente en su habitación  y otro alguien sonríe, alguien sueña, alguien toma pastillas para no soñar, alguien ayuda a la gente, y alguien no sabe en que se ha convertido, hoy alguien tiene ilusión porque al fin se ha enamorado, y alguien se ha enfadado y no ha abrazado a la persona a la que ama.

Ya ha roto el mar contra ellas, el tsunami de emociones ha empezado y ha arrasado con todo, ellos esperaban que sus caminos se volvieran a unir, pero ha llegado el momento... Las torres, han caído. El caos es inmediato, el polvo y la ceniza se apoderan de la ciudad, la gente pide ayuda, a gritos de esperanza, pero... es tan complicado, gente muere, asfixiada, y otra gente simplemente decide caer en picado. Día 15 de Septiembre, el caos esta superado, pero los corazones no han sanado, no ha habido despedida, ni un simple hasta luego.

Mi problema no es el machismo, ni el pensamiento anticuado en pleno siglo XXI. Mi problema es cuando el hombre se cree superior, con más derechos, cuando la mujer solo sirve para ser ama de casa y cuidar de los niños y su marido. Cuando debe soportar los gritos, de su marido. Pero mi verdadero problema con el machismo es cuando el hombre le pone la mano encima a la mujer, entonces, es cuando demuestra que efectivamente somos la raza animal más deplorable, ¿Que derecho tiene sobre esa persona? El que ella le ha dejado tener. Al igual que no soporto los comentarios homófogos, que importa el sexo cuando una persona es feliz junto a otra, y que importan sus creencias o su forma de vivir. Al fin y al cabo ellos son lo que perjudican al mundo con sus comentarios y sus pensamientos recíprocos.